La complejidad de la comorbilidad: Trastorno Bipolar y Trastorno Obsesivo Compulsivo

La comorbilidad del trastorno bipolar con trastorno obsesivo compulsivo no es frecuente, aunque su asociación dificulta el tratamiento. La prevalencia de los síntomas obsesivos en pacientes bipolares es actualmente objeto de debate. Son varios los autores que refieren que los pacientes con TOC-Bipolares presentan mayor número de episodios depresivos (en comparación con los no TOC-bipolares).

La clínica obsesiva en estos cuadros tiende a ser más grave durante las depresiones y períodos de eutimia, con mejorías durante los episodios maníacos. En relación al pronóstico de la enfermedad se afirma que la comorbilidad de estos dos trastornos suele tener un curso más parecido al trastorno bipolar que al TOC. Uno de los motivos por los que la coexistencia de trastorno bipolar comórbido con TOC implica mayor dificultad en el manejo es el hecho de que el tratamiento principal de los trastornos obsesivos, los antidepresivos, alteran el curso del trastorno bipolar, acelerando los ciclos.